- Socio local: Juan Ciudad ONGD (Hermanos de San Juan de Dios), en consorcio con la Fundación Signos Solidarios (Misioneras de la Inmaculada Concepción).
- Localización: Monrovia, Liberia.
- Duración: 1 año.
- Co-financiador: Asociación 0,7% trabajadores/as de Osakidetza y GV
Convocatoria: 2015
- Situación actual: En ejecución.
Breve descripción del proyecto
El Saint Joseph’s Catholic Hospital de Monrovia fue clausurado el pasado 1 de agosto de 2014 después de atender varios casos de ébola en sus instalaciones. Con la ayuda de diferentes entidades, entre ellas el Fondo Zer0,7%, reabrió sus puertas el 24 de noviembre de 2014 con una Unidad de Maternidad a la que se uniría una de Pediatría el 2 de febrero de 2015.
Desde entonces se han atendido más de 6.000 mujeres y 977 partos, un 40% de los cuales han sido cesáreas debido a la complicaciones de los mismo, algo muy común en el país.
Actualmente en Monrovia, la capital del país, los recursos siguen siendo escasos y apenas existen servicios sanitarios generales. Por ello, una de las necesidades más urgentes es la atención a pacientes con necesidades médicas generales (malarias, fiebre tifoidea, hepatitis, partos con complicaciones, diarreas, malnutrición…) siendo los niños y las mujeres embarazadas uno de los grupos más vulnerables, y por ello son una prioridad.
Todas la estrategia de reapertura del Hospital San José de Monrovia se han realizado en coordinación con las autoridades sanitarias de Liberia, la Organización Mundial de la Salud, el equipo de ébola del Obispo de Monrovia y Cruz Roja Internacional, pero sigue haciéndose necesaria la ampliación de los servicios del Hospital para garantizar el funcionamiento a pleno rendimiento del Hospital de referencia del país.
La dirección del Hospital estima como prioritaria la reforma, adecuación y ampliación de la sala de archivo de historias clínicas del centro. La creación de este espacio es primordial para el funcionamiento adecuado del hospital, y para favorecer y posibilitar la apertura y desarrollo de las distintas áreas del mismo, sin el cual no sería posible.
En la actualidad, debido al espacio limitado de esta sala, que hace las funciones de área de registros, los registros de los pacientes se quedan en el suelo a la espera de ser archivados cuando sea posible. Esta situación deriva, además de en una mala presentación e imagen, en que los archivos de los pacientes estén fuera de lugar, y sean difíciles de localizar y recuperar en caso de que se necesiten para su revisión. Así, el rastreo de la historia de los pacientes se vuelve muy complicada, y en ocasiones imposible.
Además, la ubicación de la actual sala de archivos hace que el hospital se congestione debido a que pacientes y personal convergen en este mismo lugar para buscar los mencionados registros. Con la actual situación post Ébola, el hacinamiento todavía debe ser evitado, por lo que el espacio que actualmente ocupa este lugar no es apto para su propósito.
Así, existe la necesidad de reestructurar un edificio antiguo que se encuentra fuera de las salas de consulta, pero al alcance de las consulta externas, algo idóneo para la función de la sala.
Por todo esto, se requieren trabajos estructurales de reconstrucción de un edificio en ruinas y abandonado, anexo al antiguo depósito de cadáveres. Es en este edificio, perfectamente ubicado para tal uso, donde se crearía una verdadera oficina de clasificación y archivo de documentos, además de una sala de conferencias para educación sanitaria de pacientes con SIDA y tuberculosis, y un espacio de almacenamiento para otro tipo de libros de registro.